hay que tener en cuenta varios factores críticos para los activos de una cartera de inversión: rentabilidad, riesgo y liquidez. estos factores influyen directamente en la eficacia de una estrategia de inversión. para construir una cartera de inversión con éxito, los inversores no sólo necesitan saber qué clases de activos existen, sino también comprender su dinámica en el escenario global. en 2023, por ejemplo, el mercado bursátil se mostró volátil y muchos revisaron sus estrategias para reflejar las nuevas realidades económicas.
acciones: oportunidades y riesgos
la renta variable es una de las clases de activos más comunes en una cartera de inversión. en 2023, el mercado bursátil estadounidense siguió recuperándose de la recesión económica de 2020, atrayendo a nuevos inversores. la renta variable ofrece oportunidades de dividendos y crecimiento del capital, pero se asocia a un alto riesgo debido a la volatilidad de los precios. en 2021-2022, los valores tecnológicos (Tesla, Apple, Microsoft) registraron un crecimiento del 25-30%, pero en 2023, los mismos gigantes sufrieron fuertes correcciones.
características:
- rentabilidad: en el pasado, la renta variable ha ofrecido rendimientos del 7-10% anual para inversiones a largo plazo.
- el riesgo de la renta variable es alto, especialmente para las empresas más pequeñas o los valores de sectores que cambian rápidamente. por ejemplo, las acciones de Meta cayeron un 60% en 2022, lo que pone de manifiesto su vulnerabilidad
- liquidez: extremadamente alta, ya que los valores se negocian en bolsas de todo el mundo
bonos: protección y estabilidad
los bonos son instrumentos de deuda que proporcionan a los inversores una renta fija. en un entorno de tipos de interés al alza en 2023, los bonos de renta fija se han vuelto menos atractivos, ya que el aumento de los tipos de interés reduce el precio de los bonos en el mercado secundario. sin embargo, a largo plazo, los bonos siguen siendo un activo estable en una cartera de inversión.
características:
- rendimiento: en 2023, los bonos del Estado estadounidense a 10 años rendirán entre el 3,5% y el 4%, mientras que los bonos corporativos de menor calificación podrían superar el 8%.
- riesgo: depende de la calificación del emisor. por ejemplo, los bonos de Apple o Microsoft se consideran casi exentos de riesgo, mientras que los bonos de los mercados emergentes pueden ser más arriesgados.
- liquidez: media. aunque la deuda puede venderse en el mercado secundario, su liquidez depende de la calificación y de las condiciones del mercado.
los bonos son ideales para inversores a largo plazo que buscan ingresos estables con un riesgo moderado.
fondos: comodidad y accesibilidad
los fondos de inversión son un conjunto de activos gestionados por profesionales. en los últimos años, el interés por los fondos indexados y los ETF ha sido especialmente fuerte. los ETF 2023 S&P 500 han proporcionado a los inversores rendimientos de entre el 15% y el 20%, lo que resulta especialmente atractivo frente a la inflación y la volatilidad de los mercados.
características:
- rendimiento: depende del tipo de fondo. por ejemplo, el ETF S&P 500 de Vanguard obtuvo una rentabilidad del 17% en 2023, mientras que los fondos de crecimiento más agresivos llegaron hasta el 30%.
- riesgos: medio. los fondos distribuyen el riesgo al incluir un gran número de activos en la cartera.
- liquidez: alta. los fondos cotizan en bolsa y pueden comprarse y venderse en cualquier momento. por ejemplo, el Vanguard Total Stock Market ETF puede comprarse intradía en la Bolsa de Nueva York o en el NASDAQ.
una opción ideal para quienes no desean gestionar sus propios activos pero quieren acceder a una amplia gama de valores y diversificación.
bienes inmuebles: sostenibilidad y beneficios a largo plazo
los inmuebles siguen siendo un activo importante en una cartera de inversión, especialmente ante el aumento de la inflación y la volatilidad económica. en 2023, el mercado inmobiliario estadounidense registró un mayor crecimiento de los precios a pesar de la subida de los tipos de interés. el valor de las viviendas ocupadas por sus propietarios aumentó entre un 7 y un 10%, mientras que el rendimiento de los inmuebles comerciales se elevó hasta el 5-6% anual.
inmuebles:
- rendimiento: en 2023, la propiedad residencial en las principales ciudades de EE.UU., como Nueva York o Los Ángeles, rendía entre un 4 y un 6%. por su parte, los locales comerciales en las zonas céntricas de las grandes ciudades pueden rendir hasta un 7-9% anual.
- riesgos: bajo. los inmuebles pueden ser menos susceptibles a las fluctuaciones del mercado a corto plazo. sin embargo, pueden verse afectados por crisis económicas a largo plazo o cambios en la política fiscal.
- liquidez: baja. vender una propiedad lleva tiempo y puede tardar meses o incluso años. debido a la estabilidad de los precios por metro cuadrado y a los posibles aumentos de valor, esta clase de activos sigue siendo atractiva.
oro: un valor duradero en cartera
el oro se ha mantenido durante mucho tiempo como una herramienta clásica de protección del capital. en un entorno de incertidumbre económica y elevada inflación, el metal precioso ha visto aumentar su valor entre un 12% y un 15%, lo que lo hace atractivo para los inversores que quieren evitar los riesgos asociados a otros activos.
características:
- rendimiento: el oro no proporciona ingresos regulares, pero puede revalorizarse en tiempos de crisis. en 2023, el precio del oro rondaba los 2.000 dólares la onza, un 12% más que en 2022
- riesgo: bajo. el metal precioso es un activo estable a largo plazo, pero su precio puede fluctuar bruscamente a corto plazo, como ocurrió en 2022, cuando el precio cayó un 5% debido a un repunte de la liquidez en dólares.
- liquidez: alta. el metal puede venderse rápidamente en los mercados mundiales a través de plataformas como la Bolsa de Metales de Londres o COMEX.
invertir en oro sigue siendo una buena forma de diversificar una cartera, especialmente en tiempos de crisis financiera.
activos de cartera: conclusión
la correcta asignación de activos en una cartera de inversión permite obtener estabilidad y elevados rendimientos en diferentes condiciones económicas. acciones, bonos, propiedades, oro, instrumentos de renta variable: cada categoría tiene sus propias características y riesgos. para construir una cartera de éxito, es importante adoptar un enfoque holístico, que incluya una diversificación adecuada y una selección de activos acorde con los objetivos de inversión y el horizonte temporal.